Conoce nuestro Campus Norte

Acerca de Unicervantes
UNICERVANTES es la nueva Institución de Educación Superior Universitaria de la Orden de San Agustín en Colombia, la cual hace parte de una red de universidades y centros de altos estudios en diversos países del mundo entre las que se destacan Estados Unidos, España, Filipinas, Alemania e Italia.
Nuestra red de universidades comparte la confesionalidad católica que asume la tradición, la identidad y la misión fundamental educadora de la Orden de San Agustín en el mundo, así mismo respetamos el derecho de toda persona por profesar la religión libremente y pedimos un respeto sincero en palabras, obras y actitudes hacia la fe y las autoridades de la Iglesia Católica.
El egresado de UNICERVANTES es un profesional que integra en su perfil los atributos claves para desarrollar un proyecto de vida exitoso y feliz. Es una persona íntegra, con una sólida formación ética y una clara estructura de valores como marco de todas sus acciones.
Así mismo las instituciones educativas de la Orden de San Agustín son reconocidas por la incansable búsqueda de la verdad, del conocimiento y por sus valores de solidaridad, fraternidad y compromiso ciudadano.
La Fundación Universitaria Cervantes San Agustín – UNICERVANTES es una institución de educación superior, católica, regentada por la Orden de San Agustín. Tiene como misión la formación integral de personas en una perspectiva ética, interdisciplinar, crítica e innovadora, a través de la apropiación y generación de conocimiento que promueva la excelencia académica y contribuya con el desarrollo nacional y global.
En el año 2022, UNICERVANTES será reconocida por:
- El aporte de sus egresados a la construcción de tejido social con sentido humanista cristiano.
- La promoción y el desarrollo de procesos investigativos acordes con las necesidades del contexto local, regional y nacional.
- Una oferta académica de alta calidad, orientada hacia la innovación social y la internacionalización.
- La vivencia de sus preceptos misionales en las interacciones cotidianas.
- Una infraestructura dotada de recursos físicos y tecnológicos, adecuada al logro de los procesos institucionales.
Los valores que resaltamos en UNICERVANTES para lograr que nuestra comunidad pueda desarrollarse de manera alegre e íntegra se consagran en los siguientes:
- La verdad:
En una época como la nuestra, marcada por el escepticismo frente a valores fundamentales, la apuesta por la verdad es un claro diferencial institucional. En este sentido, es rechazable tanto el extremo del fundamentalismo como del relativismo. Para llegar a la verdad se debe transitar por la vía de la inteligencia, la fe y la razón. Con este presupuesto agustiniano se evidenciará en la comunidad educativa la coherencia, la sencillez y la transparencia delante de Dios y de los demás. San Agustín afirma que la verdad habita en el interior del hombre (De vera religione 39, 72). De ahí que el estudio de la verdad no puede prescindir del conocimiento propio, debe empezar por acudir al interior, pues el Maestro interior (Cristo) enseña desde la cátedra del corazón. - La libertad: es una característica de la voluntad, la cual, iluminada por la verdad, nos faculta para ser dueños de los actos que realizamos, responsables de nuestras decisiones, buscadores del bien que nos perfecciona llegando a ser independientes de toda ideología o forma de esclavitud. Para no caer en una deformación de la libertad se requiere la ayuda de la comunidad y un adecuado proceso educativo. La libertad orienta, perfecciona y ejercita responsablemente las cualidades individuales en el cumplimiento del propio deber, en solidaridad con el bien común, con respeto y tolerancia a los demás.
- La amistad: es el valor agustiniano por excelencia. Toda la vida de san Agustín fue un cultivo de la amistad definiéndola como “el acuerdo en las cosas divinas y humanas con benevolencia y caridad” (Epistola 258, 1). Los amigos son un bien importante en la formación del carácter personal, pues gracias a ellos, es posible la práctica de los valores comunitarios. Fuera de la comunidad, el hombre no puede perfeccionarse plenamente a sí mismo, pues necesita de amigos a quienes poder hacer el bien y de quienes, a su vez, poder recibir el bien. El valor de la amistad es vital, pues esta es el fruto de la comunidad y a su vez genera un clima laboral y académico cálido y humano.
- La comunión: El valor de la comunión se sustenta en la misma necesidad de la amistad. En efecto, para construir verdaderas comunidades armónicas y perfectivas, es preciso que sus miembros gocen de la comunión, aprendan a superar sus diferencias y a aceptarse los unos a los otros. A través de la vida común, la persona adquiere consciencia de su ser-en-relación, de modo que no pretende realizarse al margen de los otros, ni por encima de ellos. Contar con los demás es requisito indispensable para ser plenamente uno mismo. La comunión en la institución debe comprenderse como el valor de la unidad que genera además acciones concretas de proyección social.
- La inquietud: En la trayectoria existencial agustiniana, la inquietud se presenta como la tensión continua del alma en la búsqueda de la verdad. Gracias a ella, san Agustín se atrevió a cuestionarse constantemente por la validez de las certezas adquiridas y por la calidad de su amor. Esta lucha interna, decidida y auténtica, permitió que saliera del error y amaneciera para él la aurora de la verdad. Su célebre frase “Nos has hecho para ti y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en Ti” (Confessiones1,1,1) revela la respuesta agustiniana a la angustia existencial del hombre moderno, el cual, encontrará el alivio y el descanso que tanto ha buscado cuando decida volverse hacia Dios.
Los principios que resaltamos en UNICERVANTES para lograr que nuestra comunidad pueda desarrollarse de manera alegre e íntegra se consagran en los siguientes:
- La caridad: En la doctrina agustiniana, el amor o charitas tiene un papel central, al punto de determinar y configurar existencialmente, pues el amor es una fuerza que impulsa, dirige y anima la vida misma del ser humano. San Agustín señala la utilidad del amor para el estudio y para la vida: “El que tiene caridad, lo ve todo y con inteligencia” (In Ioannis Epistolam 7, 10). El amor por la sabiduría ejercita al discípulo a su estudio, y la misma sabiduría atrae los afectos y mantiene vivo el ardor de la investigación. La enseñanza de verdades trascendentales propicia que los educandos puedan ordenar sus amores según auténticas prioridades, y de esta forma, escriban con decisión en las páginas de su propia historia.
El amor se entiende en el pensamiento agustiniano como la búsqueda de Dios, la cual se traduce en el deseo por el Supremo Bien. La caridad auténtica del hombre implica no solo el querer el bien para sí, sino que lo lleva a manifestarlo a los demás. El ideal de la educación en UNICERVANTES consiste en que todos los que hacen parte del proceso formativo experimenten ante todo con sus actividades el deseo de Dios, que se traduce en la caridad como valor supremo, que debe impulsar todos los procesos institucionales. Así pues, dentro del itinerario de la formación universitaria se busca que todas las personas que trabajan, se educan y se benefician de la institución, ordenen sus amores según el Supremo Bien. Cuando el hombre ordena sus amores por virtud es capaz de hacerse agente transformador de la sociedad, armoniza sus relaciones con los otros y su fin último es la felicidad.
- La sabiduría: La sabiduría o sapientia en el pensamiento agustiniano se entiende como la apertura del hombre a lo trascendente por el camino de la fe, mediante el cultivo de las virtudes y la generación del conocimiento por medio de la ciencia y de las artes.
UNICERVANTES, como institución católica y agustiniana, orienta todas sus actividades académicas desde el diálogo entre la fe y la razón, acompañadas de la búsqueda de la Verdad, formando personas con excelencia académica y sentido espiritual. La institución se sostiene en una visión muy precisa de lo que es el ser humano como persona y como ser anhelante de verdad. Gracias a este anhelo de saber, los hombres devienen naturalmente filósofos, es decir, amantes de la sabiduría, y de ese interés brota el asombro, la inquietud, la investigación y el estudio.
- La comunidad: La comunidad o communitas en el pensamiento agustiniano se entiende como búsqueda del bien común que prevalece sobre los intereses individuales, y no se equipara a la mera aglomeración o jerarquización de los individuos. La comunidad no busca la uniformidad, es precisamente en la diversidad donde se enriquece y ayuda al crecimiento de todos, cuando se vive en constante construcción de la armonía y del bien común.
Este proyecto de vida anima al ser humano a realizarse y a convertirse a Dios con la ayuda de sus hermanos, sin desconocer a nadie. Cuando se trabaja en bien de la comunidad, la búsqueda de la verdad resulta más provechosa, el diálogo fructífero y la convivencia amistosa. En este sentido, la institución es un espacio en el que se propicia un ambiente comunitario de apoyo mutuo, de solidaridad, de fraternidad, de apertura a las necesidades comunes como clima apropiado de crecimiento personal.
Consecuentemente, al ser inspirada por estos tres principios del pensamiento agustiniano, UNICERVANTES adopta la vivencia de los siguientes valores que marcan la convivencia dentro de la comunidad educativa.
La Fundación Universitaria Cervantes San Agustín – UNICERVANTES, se compromete a gestionar servicios de Educación Superior de alta calidad a través de los procesos de Formación, Investigación y Extensión, el uso eficiente de recursos y un talento humano idóneo, que conjugados promuevan la excelencia académica; la identificación y el control de los riesgos de seguridad y salud en el trabajo de las personas vinculadas, así como de los aspectos e impactos ambientales que genera con su actividad misional.

Documentos Institucionales

Resoluciones
